La declaración del Frente Amplio sobre la segunda vuelta presidencial ha causado polémica. Por un lado se acusa de ambigüedad, y por otro se nos sindica como los eventuales responsables de una derrota de Alejandro Guillier. En mi opinión, la declaración refleja de buena manera lo que fue el debate al interior del Frente Amplio después de la primera vuelta:
1-. No formaremos parte de un futuro gobierno ya que nuestro proyecto es diferente por cierto al de la derecha, pero también al de la Nueva Mayoría. Lo anterior sin perjuicio de poder llegar a acuerdos en temas determinados.
2-. Dado lo anterior no entraremos en una negociación privada ni por cargos ni por medidas. Plantearemos debate público respecto de los puntos eje de nuestro programa.
3-. Si bien ninguno de los candidatos y proyectos que se enfrentan en la segunda vuelta nos representa, reconocemos que no son lo mismo. En ese sentido coincidimos en que la derecha significa un retroceso para el país.
¿Por qué entonces no llamamos derechamente a votar por Guillier?
Porque Guillier no es solo Guillier sino también la coalición que lo respalda. Porque no podemos olvidar la aplicación de la ley anti-terrorista en la Araucanía, los ex-ministros de la Concertación de directores en las AFP's, los casos transversales de corrupción, la ley de pesca y SQM, los servicios mínimos en caso de huelga y la negativa permanente a avanzar hacia la negociación ramal, la mantención del sistema de financiamiento vía voucher en la educación pública y el incumplimiento del compromiso con las regiones para elegir a sus propias autoridades, entre muchas otras cosas.
Y es que nuestro proyecto y horizonte son diferentes, y es totalmente legítimo que así sea. Pero por lo mismo, no pueden pretender que de un día para otro tengamos el entusiasmo que a sus mismos adherentes les falta.
En los últimos días, varios integrantes del Frente Amplio, tanto dirigentes como compañeros de base, han expresado su apoyo a Alejandro Guillier en la segunda vuelta. Se han esgrimido diferentes motivos, pero el principal es evitar que la derecha llegue al poder. Está bien que cada uno exprese sus opiniones y sin duda esto está dentro de los márgenes del acuerdo colectivo al que llegamos como FA. Sin embargo yo al menos difiero de la estrategia de ir entregando apoyos individuales como cuentagotas. Creo que nuestro rol como frenteamplistas es por un lado enfrentar a la derecha y señalar, tal como expresa la declaración del FA, que esta implicaría un retroceso para el país. Pero al mismo tiempo debemos estar permanente interpelando a la Nueva Mayoría (o lo que queda de ella), corriendo sus cercos, debatiendo públicamente con nuestras ideas y programa en un ánimo constructivo pero que de cuenta también que somos proyectos distintos, que eventualmente podremos llegar a acuerdos en algunos temas sin que ello implica ni mimetizarse ni subordinación. Sumar y no ser sumados como aprendimos desde chiquititos.
En lo personal, la verdad es que yo aún no he decidido mi voto. Tengo claro que iré el 17 a votar y que no lo haré por Piñera. Pero sobre si votar por Guillier o no, lo decidiré en la recta final de la campaña en virtud de si ha recogido o no parte del espíritu de lo que planteamos al país como Frente Amplio. Como expresé en una entrevista al Desconcierto, la decisión no puede ser al calor de una suerte de subasta programática, sino más bien producto de si logramos identificar espacios de convergencia en principios compartidos. En ese sentido, yo no pretendo que Guillier sea un espejo del Frente Amplio, y sería absurdo esperar que tomara el 100% de nuestro programa, pero quiero saber con más certeza si es que él y su coalición están por terminar con el negocio de la salud o no. Si es que creen que debemos avanzar hacia un sistema público y solidario en materia de pensiones o no. Si es que descentralizar el poder en Chile es una convicción compartida en serio o no. Si es que terminar con la pitutocracia del SENAME y hacerse cargo de su crisis lo tomarán en serio o no. Si es que creen que la educación pública debe ser el eje del sistema o no. Podemos discutir gradualidades y las formas de avanzar hacia allá, pero lo importante es saber la dirección hacia donde se avanza. Y eso hasta el día de hoy, en mi opinión, esto no está claro.
En cualquier caso, nuestros desafíos, tanto como Movimiento Autonomista y como Frente Amplio son muchos. Tratarán de domesticarnos y la burocracia y el cretinismo parlamentario serán también una amenaza si es que perdemos el norte de por qué llegamos ahí. No podemos olvidar que el sentido de nuestra apuesta electoral es abrir un espacio que estaba cerrado para voces que no habían sido escuchadas, sin pretender suplantarlas. Eso implica un vínculo permanente con los movimientos sociales, un intenso trabajo territorial de nuestras organizaciones que se funda con la realidad de nuestro pueblo, una conciencia histórica que entienda que ni el mundo ni la izquierda parta con nosotros.
La pega es mucha y estoy optimista. Pero no podemos marearnos. No va a ser fácil.
Un abrazo!
Patético que dentro del margen que mencionas, individualmente se vaya rompiendo el acuerdo firmado como colectivo. Y que venga de los líderes acentúa aún más el "error". Dónde queda la coherencia política, un bien escaso en estos tiempos. Creí en el FA precisamente por la coherencia, pero estos actos individuales rompen todo aquello que se construye en medio de dificultades...
ResponderEliminarSolo pedir que este sea el norte del FA durante los cuatro años que vienen.
ResponderEliminarPatetico
ResponderEliminarLa N.M seguirá torturando mapuches, matándonos, seguirán robando, mintiendo, no pondrán fun a las afp, ya tuvieron 15 años para hacer algo y deben tener una señal clara de que no los queremos mas porque no somos idiotas.
ResponderEliminarComparto tu opinión Gabriel, pero creo que esta suerte de entreguismo que se está viendo últimamente dentro del FA no nos hace bien. Donde quedo eso de tensionar el escenario político frente a la 2da vuelta?
ResponderEliminarYo personalmente aun no decido tampoco si votar Guillier o nulo, la verdad es que la NM no me respresenta en lo más mínimo, y cómo compañero de base creo también que dentro del MA nos faltó una posición mas clara dentro del FA y llevarla adelante con mas rigurosidad.
De todas maneras esto nos servirá para aprender y construir durante estos 4 años que van a ser muy duros, pero en el escenario actual puntualmente creo que nos faltó ser mas cautos. Nos apuramos cuando nadie nos presionaba, tal como un novato defensa ante la presión de un 9 experimentado.
Vamos adelante con aprendizaje y mas fuerza que nunca.
Saludos.
Parece que no todos entienden lo de votar por el "Menos toxico de los candidatos"
ResponderEliminarGuillier no es perfecto, y hoy se le están colgando bastantes lacras de la nueva mayoría. Pero es la opción menos dañina para el país.
Si no lo ven asi, deben ir a la urna y dibujarle un pene al voto. Asi anulan y representaran al inmenso porcentaje que no se siente identificado con la política y que no esta apoyando a ningún candidato.
Completamente de acuerdo, vote FA y no soy militante sino alguien de izquierda agotada de la transa concertacionista con los grupos de interés que dominan la economía, la salud, las pensiones, los recursos naturales y tantos otros aspectos de nuestras vidas. A mi no me basta el antipiñerismo, no me basta votar por el mal menor, por lo menos malo. Lo hice en el pasado y me decepcionaron. Esta vez vote por el programa del FA que me convenció... y después de eso no podría endosarle mi apoyo a un candidato que no satisfazga en un piso mínimo mis anhelos de cambio y normalizacion para este país tan desigual como injusto y anormal. Me quedan 30 o 40 años para hacer algo distinto, para que mi marido y yo envejezcamos de manera digna con apoyo del estado y la solidaridad que los chilenos hemos ido perdiendo. Quiero apostar por un cambio de paradigma, una manera distinta de hacer las cosas a como se han hecho hasta ahora, si es que lo que quiero es un Chile más justo para nosotros, su gente. Ese deseo ya no lo quiero hipotecar más por un gesto, un guiño, una señal. Requiero de compromisos programáticos serios para ir a votar por el candidato oficialista. Saludos
ResponderEliminarComparto tu diagnostico y reflexion pero no solo hay que pensar en la segunda vuelta debido a que me imagino que el objetivo del F.A. es llegar a ser gobierno en unas proximas elecciones y cuando lo seamos se necesitara a la N.M. para avanzar en esas transformaciones sociales que tanto anhelamos, debido a esto votare por Guiller.
ResponderEliminarCreo que Gabriel debió haber respetado los acuerdos que se tomaron al interior de nuestro movimiento autonomista que es la orgánica a quien responde.
ResponderEliminarSi quería votar por guillier, por miedo a que ganara piñera, debió hacerlo en silencio y con vergüenza, pero no pasando a llevar a toda la militancia del MA y del FA.
Muy mal Gabriel ahí....una lástima
No es primera vez que Gabriel dice y después hace otra cosa...recordemos cuando en tiempos de dirigente de alumnos si no llegaba a cumplir con los petitorios se retiraría de todo de la dirigencia y la política. ...y no paso nada!!!Cuac! Más de lo mismo!!
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