jueves, 3 de noviembre de 2011

Intervención Plenaria Senado Universitario 03-11-2011

Estimados, pongo a su disposición mi intervención en la Plenaria del Senado Universitario del día de hoy, en el marco del debate sobre el inicio (o no) del 2do semestre,

Ante cualquier duda o comentario, no duden en escribir.

Un abrazo!




Creo que para enfrentar el tema del inicio del segundo semestre en la Universidad es necesario realizar un análisis del actual momento político antes de pensar en que soluciones podemos ofrecer.

En primer lugar, mirando el panorama general del conflicto, es claro que el gobierno ha dejado de lado la interlocución con los estudiantes, para traspasar el conflicto de lleno al parlamento, con una estretegia que básicamente consiste en amarrar la aprobación del presupuesto de la nación como un paquete completo sin discutirlo por partidas y así tensionar al sector más institucionalista de la Concertación y en particular de la Democracia Cristiana.
  
En este escenario, el movimiento estudiantil ha quedado off-side, perdiendo la iniciativa y pasando de tener un debate de carácter nacional, centrado en las demandas de fondo del movimiento, a uno de carácter local, centrado en las formas de movilización y por ende enfrentando tensiones propias de una movilización que ya lleva cerca de 6 meses y que ha acumulado altos niveles de frustación dado la poca apertura del gobierno ha ceder en su postura, que, con mínimas modificaciones, se mantiene básicamente igual desde la presentación del GANE.

Entonces, ¿dónde estamos hoy?

Enfrascados en un conflicto interno, con estudiantes divididos artificialmente en torno a las formas, con los académicos cada vez más ajenos al conflicto, y con las autoridades en una postura con tintes autoritarios presionados desde el gobierno y desde sus propias "bases". En el fondo hemos quedado atrapados en la estrategia de la peor calaña del gobierno.

El tan conocido divide y vencerás.

Es en este contexto de división en que el Senado tiene que jugar un rol de liderazgo que reconduzca el actual conflicto hacia los temas realmente importantes que son precisamente a los que apunta el Senador Cárdenas. Pero para eso, no podemos hacernos los lesos con el actual conflicto. Por lo tanto, comparto lo propuesto por el profesor Martínez que emano ayer desde la Comisión de Educación en el sentido de impulsar un gran acuerdo triestamental de la Universidad que permita descomprimir las actuales tensiones que estamos viviendo dentro de la Universidad. Es imperativo que recordemos que los adversarios de la Educación Pública están fuera de la Universidad y no dentro de ella.

En concreto propongo que esta propuesta de acuerdo debe contener los siguientes elementos, entre otros.
(me gusta la idea de "nueva normalidad" que esboza la profesora Kemy Oyarzún).

1-. Cronograma de movilizaciones a nivel triestamental.
2-. Compromiso explícito de los académicos de participar activamente de las movilizaciones.
3-. Compromiso por parte de los estudiantes de evitar las tomas porque cuando éstas suceden dividen a la comunidad y el problema pasa a ser la toma y no el conflicto de fondo.

A estos elementos se les debe agregar otros compromisos por parte de la Comunidad, y el Senado debe actuar como garante de ellos. Este acuerdo debe ser entendido necesariamente como una totalidad, ya que parceladamente no tiene ninguna posibilidad de cursar.

Ahora los tiempos de la movilización deben seguir supeditados a lo que se decida desde el movimiento estudiantil. En este sentido les pido la mayor compresión y paciencia posible. En el pleno Fech de mañana se va a decidir cuando se debe reevaluar el tema de la vuelta a clases, y creo que vamos a ser capaces de volver a poner sobre la mesa la necesaria relación de funcionalidad que debe existir entre los medios de movilización y los objetivos políticos del movimiento, con la mente puesta, insisto, en que nuestros adversarios están fuera de nuestros pasillos y a un par de cuadras de nuestra Casa Central.

Pero es importante que los académicos y las autoridades no pretendan pasar por encima de los tiempos del movimiento estudiantil, porque somos nosotros, quienes al final del día, hemos puesto la carne y sangre en esta movilización.

1 comentario:

Anónimo dijo...

contigo,sigo pensando que el "sueño todavía existe".

Saludos.

AT.